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Por Hispanorromano
Me han dejado sobrecogido estas declaraciones del Papa, que es perfectamente consciente de lo que traman contra él aunque hasta ahora le había restado importancia. Dejo la noticia (por supuesto, silenciada en todos los "medios católicos") por si queréis comentar vuestra opinión:
El Papa Francisco / FABIO FRUSTACI (EFE)
Europa Press Roma 21 de septiembre del 2021. 13:56 El papa Francisco ha revelado que tras su operación de colon "algunos le querían muerto" y que sabe que algunos prelados se reunieron para preparar el "cónclave" pensando que su estado de salud era "peor" de lo que se informaba por parte de la oficina de prensa de la Santa Sede. "Estoy todavía vivo, aunque algunos me querían muerto. Sé que ha habido encuentros entre prelados que pensaban que el Papa estaba más grave de lo que se decía. Preparaban el cónclave", aseguró Francisco en un encuentro a puertas cerradas y sin periodistas el pasado 14 de septiembre con los miembros de la Compañía de Jesús durante su viaje a Eslovaquia cuyo contenido ha sido publicado de forma íntegra por la revista de los jesuitas 'La Civiltà cattolica'.
El Pontífice advirtió además de que hay una televisión católica que "continuamente habla mal del Papa". A su juicio, personalmente puede merecer ataques e "injurias" porque es "un pecador", pero "la Iglesia no se merece esto". "Es obra del diablo. Se lo he dicho a algunos de ellos", agregó el Papa, que no especificó de qué cadena de televisión estaba hablando.
También comentó que "hay clérigos que hacen comentarios malos" sobre su persona y reconoce que a veces le "falta la paciencia, especialmente cuando juzgan sin abrir un diálogo". "Ahí no puedo hacer nada. Yo voy adelante sin entrar en su mundo de ideas falsas o fantasías. Algunos me acusaban de no hablar de la santidad. Que siempre hablo del tema social y que soy un comunista. Y eso que he escrito una encíclica entera sobre la santidad 'Gaudete et Exultate' Yo voy adelante no porque quiera hacer una revolución. Hago lo que siento que tengo que hacer; se necesita mucha paciencia, oración y caridad", señaló.
El Papa también expuso los motivos por los cuales ha firmado un documento pontificio que limita la celebración de la misa tridentina con el que además regula las misas en latín, lo que ha causado un escándalo en los sectores tradicionalistas. "Espero que con la decisión de frenar el automatismo del rito antiguo se pueda volver a las verdaderas intenciones de Benedicto XVI y Juan Pablo II. Mi decisión es fruto de una consulta con los obispos del mundo el año pasado", explicó.
Por otro lado, también identifica como un mal "buscar en el camino de la rigidez y del clericalismo" soluciones eclesiales al tiempo que define estas dos actitudes como "dos perversiones".
Revelación del Papa tras su operación: "Algunos me querían muerto"
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Por Hispanorromano
Comparto con vosotros un fragmento de un libro que me ha parecido interesante. Trata de la desinformación y de las enormes posibilidades que ofrece internet a la hora de desinformar y manipular. El texto es un poquillo largo para lo que se estila en internet, pero se lee con relativa rapidez y de todas formas he señalado en negrita las ideas que encuentro más significativas.
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Por Hispanorromano
Aunque tenemos un hilo dedicado a tratar sobre el fenómeno de las teorías de la conspiración y su creciente auge, creo que este artículo merece un hilo propio por su importancia. El artículo lo publica Luis Santamaría del Río, uno de los fundadores de la Red Iberoamericana de Estudio de las Sectas, una asociación católica que estudia el fenómeno de las sectas de forma rigurosa, lo que hace que la prensa seria le consulte para algunos temas. Tiene una columna en Infocatólica, así que espero que nadie le vaya a acusar de "progre". Es importante que D. Luis Santamaría, Licenciado en Teología, señala que la Nueva Era y, en definitiiva, el gnosticismo son el verdadero motor de este nuevo tipo de conspiracionismo, de este sectarismo difuso al que algunos estudiosos se refieren como conspiritualidad. Creo que es la primera persona que trata este asunto en el ámbito español. Aparte de nosotros, claro, que lo venimos diciendo pero sin el conocimiento y la autoridad que respaldan a D. Luis.
Le pido a D. Luis Santamaría que me disculpe porque he alterado las negritas que él había puesto para destacar algunos de los temas que venimos tratando específicamente en este foro.
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Por Hispanorromano
Ahora que se discute mucho sobre las medidas a tomar por la pandemia de Covid-19 o que se cuestiona la vacunación, aun no siendo obligatoria en el momento actual, creo interesante rescatar una ley, sancionada por el Generalísimo Franco en 1945, que abordaba todos estos aspectos.
Esta ley de 1945 nos permite comprender cuál era el tratamiento que se adoptaba entonces ante las pandemias. Y no lo creo muy diferente al tratamiento que adoptarían los regímenes democráticos de aquella época. Veréis que se habla de aislamiento de los portadores, sean convalecientes o sanos (los "asintomáticos" que dirían ahora), en términos expeditivos; que era obligatorio comunicar a las autoridades si se sospechaba de alguien por presentar síntomas; que se preveía el cierre de establecimientos y escuelas; que había la obligación de presentarse ante la autoridad médica cada pocos días hasta que al portador se le expidiese un salvoconducto que le declarase libre de la enfermedad; y, más importante que todo eso, que se declaraba obligatoria la vacunación (no sé si con chip o sin chip) contra ciertas enfermedades contagiosas y el incumplimiento de dicha norma podía acarrear graves sanciones.
Ahora que se considera dictatorial cualquier medida coercitiva en relación con la pandemia, y ahora que se cuestionan las vacunaciones, a pesar de que no son obligatorias, puede ser interesante rescatar este texto legal que nos ofrece algo de perspectiva histórica: así se trataban estos problemas hace ochenta años. Y además resulta hasta necesario, porque en la campaña contra las vacunaciones se está destacando un diario digital que depende de la Fundación Nacional Francisco Franco, que todos los días publica cerca de diez artículos contra las vacunas y contra las medidas de confinamiento, frente a las que promueve una desobediencia sistemática.
Quede claro que no se trata de defender a los gobiernos actuales que están afrontando la pandemia, cuyo tratamiento deja mucho que desear, ni de considerar como ideales las medidas tomadas en 1945. Se trata de aportar un poco de perspectiva histórica al asunto. Aunque desde luego me parecen bastante correctas las medidas tomadas por Franco en aquella época, donde no era frecuente tomarse a broma estas cosas, a diferencia de lo que sucede hoy, en esta sociedad del entretenimiento masivo.
Cito sólo una parte del articulado de la ley, para no hacerlo muy largo, y destaco en negrita los pasajes que considero más interesantes.
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Por Hispanorromano
Carlos Marín-Blazquez publica un brillante artículo sobre la mentira en la revista digital La Controversia. Esta revista se ubica políticamente en el campo conservador y probablemente afín a Vox. Carlos Marín-Blazquez no pone ningún ejemplo concreto, con lo que bien podría referirse exclusivamente a las mentiras de la izquierda, pero en alguna frase da a entender que es cada vez más amplio el espectro ideológico afectado por esta carcoma, que corrompe todo lo que toca y que debilita el tejido común de las sociedades hasta hacerlas inviables.
Me parece una reflexión muy lúcida por parte de Carlos Marín-Blázquez y le honra que la haya publicado en una revista de derechas, que parece el sector ideológico más afectado por esta carcoma moral en los últimos tiempos. Considero que es uno de los temas más importantes de nuestra época: el avance de la mentira, facilitado de manera extraordinaria por internet, y la capacidad de este pecado para corromper, desmoralizar y cuartear sociedades. En definitiva, el poder destructivo de la mentira y la liviandad con la que amplios sectores ideológicos y sociales se viene entregando a ella, debilitando así la nación.
Más adelante quizá ponga algunos ejemplos de esta aceptación complaciente y cínica de la mentira por parte de muchas personas y de cómo esto va erosionando la nación española.
Debo comentar que la frase que cita de Chesterton en realidad no es de este escritor sino de uno de sus biógrafos (Emile Cammaerts, The Laughing Prophet, 1937), que glosó así, con gran acierto, el espíritu de la obra chestertoniana.
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