Español

Ciertamente y dada la sacralización de la democracia en la que vivimos, una medida así no tendría recorrido pero quizás con fuertes incentivos fiscales y económicos, como la exención de impuestos y ayudas a las familias y pequeñas empresas que se estableciesen en las zonas a recuperar, la dotación de viviendas y recuperación de escuelas y dispensarios, y muchas otras medidas de promoción y ajuste económico que sí encajarían en un marco democrático, además de la concienciación que ya indicas al final de tu intervención, sí que creo que podría recuperarse buena parte del entorno rural abandonado. Yo creo que se trata más de un tema de voluntad política que de imposibilidad material, a fin de cuentas la concentración en grandes urbes produce mayor riqueza económica a las arcas fiscales y supone un ahorro considerable en la prestación de servicios con respecto a una población dispersa. El economicismo lamentablemente hace el resto.

Hombre Gerión, lo de Blas infante con su bandera Omeya lo entiendo, pero culpabilizar a Andalucía también de lo de Gibraltar, se me escapa. De otro modo, muy de acuerdo con lo que dices acerca de que Andalucía es la puerta despreciada de América que nuestros gobernantes han olvidado poniendo su vista en Europa. Andalucía podría recuperar gran parte de su importancia histórica y riqueza, si España fuese capaz de recuperar esas conexiones americanas también olvidadas.

Caray, ignoraba la historia de la música electrónica y el cura del artículo que ha referido Gerión. Interesante aportación.

¿Hasta qué punto puede que exista ahí, una remanente gnóstica heredada del nestorianismo? Como comentábamos anteriormente, es de los viajes del apóstol Tomás, de donde parece surgir el mito del Preste Juan, que posteriormente se identifica con las comunidades cristianas nestorianistas. También el apóstol Tomás es el protagonista de dos hechos evangélicos singulares que denotan una confusión del mensaje de Cristo ya que, no parece tener claro el destino de Jesús cuando en la última cena le pregunta: "Señor, no sabemos a dónde vas; ¿cómo podemos entonces saber el camino?" Posteriormente es el único de los discípulos que se niega a creer en la resurrección de Jesús cuando dice: "Si no veo en sus manos la señal de los clavos y meto mi dedo en el lugar de los clavos, y meto mi mano en su costado, no creeré." Lo que quiero decir con esto es que, desde el mismísimo origen, Tomás parece que tiene problemas para entender la verdadera naturaleza y misión de Jesús. Y posteriormente, toda el área de influencia de su evangelización, es la que acaba abrazando el nestorianismo, que tiene una componente gnóstica importante precisamente por entender que en Cristo conviven dos naturalezas separadas, humana y divina. Con el tiempo se ha visto también que, la predicación de Tomás ha servido de base a las comunidades gnósticas, cuando en el siglo pasado aparecen los evangelios apócrifos de Nag Hamadi, y el "Evangelio de Tomás", se revela entre estos textos como un claro referente del gnosticismo de la época de los primeros cristianos. ¿Sería acertado pensar que, esa remanente gnóstica que señalas en la escuela geopolítica euroasianista, haya permanecido latente en esa área, desde el origen mismo del cristianismo hasta la actualidad? No hay que olvidar que, la Iglesia Asiria, fundada por Santo Tomás y heredera también del nestorianismo, sigue vive y presente en toda esa región oriental. No quiero decir con esto que la evangelización de Tomás fuese en vano o estuviese equivocada, sino que, puede que una pobre comprensión de la predicación de Tomás, haya permitido el asentamiento de un falso entendimiento gnóstico del cristianismo en toda el área de influencia de su predicación. Si esto fuese así, revelaría hasta qué punto es importante que, cuando hablamos de la extensión de una idea o una sociedad, en lo espacial y en lo ideal, "la estructura de lo propuesto tenga los pilares en su sitio".

La imagen siempre ha tenido una componente banal. Ya en la Biblia Dios prohíbe al hombre hacerse imágenes de lo que está arriba en el cielo y abajo en la tierra, y esto creo que tiene un significado concreto ya que la imagen cercena una de las cualidades más poderosas del ser humano, su imaginación. La imagen es capaz de fijar en nuestra memoria, un estado de las cosas que en realidad es variable, diverso y circunstancial, y por tanto nos sustrae de enriquecernos el entendimiento con dicha diversidad. Esa misma imagen de la Plaza Mayor de Salamanca que aparece en el artículo, vista en vivo no evoca lo mismo a un turista japonés que a un americano, ni a un salmantino de izquierdas que a uno de derechas. Ni siquiera va a significar lo mismo para dos personas de una misma familia que la visiten en el mismo momento del día, sin embargo, cuando la imagen se fija en un papel o en un archivo digital, aislada del observador, de su contexto y del ambiente cambiante, pasa a convertirse en una especie de prototipo de lo que debe ser y significar dicha plaza para todo el mundo. Trataré de explicarlo con un ejemplo más concreto. Soy catequista de confirmación en mi parroquia, y por ese motivo ayer conversaba con un grupo de jóvenes de entre 17 y 18 años, sobre como imaginaban ellos a Dios. Todos sin excepción, tenían hecha una imagen de Dios, fundamentada en la imaginería del arte sacro. Más o menos la mayoría lo imaginaban como un anciano de largas barbas, con un triángulo en la cabeza y los brazos abiertos, que desde las nubes observa cuanto ocurre en el mundo, lanzando a veces rayos a quienes no actúan como él quiere. Si uno escribe Dios en Google y busca por imágenes, esa es exactamente la imagen mayoritaria que devuelve el buscador, completamente distorsionada con respecto a la realidad, y por tanto distorsionadora del entendimiento humano de Dios. Transmitir el ser, el amor y la voluntad a Dios desde esa perspectiva, es francamente una tarea muy difícil. En realidad, puede decirse que se trata de un hecho limitante, tanto para este caso concreto de la religión como para muchos otros campos de la realidad humana. Y aquí es donde debería entrar el arte como expresión creativa y diferenciadora, capaz de aportar una construcción ideal más sólida y evocadora de la que aporta la repetición incansable de imágenes similares. En el caso que comentaba de estos jóvenes, me veo en la obligación de elaborar una imagen más perfecta de Dios que la que ellos han heredado, para romper las limitaciones que aquella tiene y aunque en su día sirviese para transmitir una determinada idea de Dios adaptada al entendimiento de otra época. Paradójicamente, el arte es aquello capaz de evocar trascendiendo la banalidad, pero que el tiempo acaba convirtiendo en banal, ya que la vida es cambiante y todo lo que hoy es singular mañana se transforma en plural. La imagen banaliza tanto a Dios, como a la Plaza Mayor de Salamanca o lo que se quiera dibujar. Sin embargo, nuestra realidad se ha configurado en torno a las imágenes, y por tanto las necesitamos para construir una idea de la realidad en la que nos movemos, eso es algo que no tiene vuelta atrás salvo que ocurra un cataclismo que nos cambie por completo toda la realidad existente. Hasta las sectas y religiones más literalistas con respecto a ese mandato bíblico, han elaborado diferentes formas de imaginería, necesarias para construir su mundo de ideas. Y como todos vivimos en alguna medida en el mundo de las ideas, es inevitable que, a medida que la técnica permite que hasta el menos avezado pueda elaborar imágenes, hoy estas se multipliquen hasta la saciedad banalizando más y más ese mundo ideal en donde se mueve el ser humano. La banalización de la imagen, ya sea fotográfica o pictórica, no se da tanto por la profusión de artefactos capaces de captar imágenes, como por nuestra multiplicidad y necesidad de captarlas para expresar así los sentimientos, emociones o deseos que nos evocan. Dicho de otra manera, necesitamos compartir nuestro particular mundo de las ideas para sentirnos parte de una comunidad, y eso provoca la multiplicación de imágenes como comunicadoras de ese mundo. Yo lo veo como un árbol en flor, donde cada imagen es una flor que invita la polinización mediante el deleite de su néctar, pero donde solo algunas, las mejores, se convertirán mañana en frutos de donde surgirán nuevos árboles o construcciones ideales. Y como en todo árbol, creo que en este de las imágenes digitales que lo inundan todo, también llegará un momento en el que las flores marchitarán dando paso a frutos reales. Hay una máxima entre los fotógrafos más tradicionales que dice que: "Toda fotografía que no se imprime, no es más que un proyecto inacabado". No sé si habréis visto la película El Último Samurái, una de las mejores películas que a mi entender ha dado el cine, donde se narra de manera excelente la desaparición del orden tradicional. Hay una escena sonde Katsumoto le muestra a Algren su inquietud poética, explicándole que está escribiendo un poema sobre la flor perfecta, como alegoría de la vida, añadiendo al respecto que es algo muy raro y que quién dedique su vida a buscar una sola, no habrá malgastado su vida. Cuando al final de la última batalla Katsumoto muere, antes de morir encuentra el verso que le faltaba para completar el poema de su vida, y dice mirando a unos cerezos florecidos que se ven al fondo: "Perfectas...Son todas perfectas".

El problema son los conceptos de riqueza y producción que hoy están subyugados al de producción económica. Mientras eso siga siendo así, no hay ninguna salida para el campo que no pase por hacerlo altamente productivo con respecto al mundo urbano. O somos capaces de redifinir los conceptos sobre los que se desarrolla la sociedad y se establecen las leyes o estamos abocados a la muerte inequívoca del mundo rural y en general a la "mutación disneylandiana" de todo el mundo natural.

Ahora ya apenas queda una minoría de todo el flujo de inmigrantes ecuatorianos que había hace unos años antes de la crisis, pero recuerdo haber tratado con muchos ecuatorianos que se acercaban a Cáritas en busca de apoyo, sobre todo a raíz del estallido de la burbuja y la quiebra de la construcción, y no tengo memoria de haber oído hablar mal de España a ninguno de ellos, es más, se mostraban muy agradecidos con España y lamentaban encontrarse en aquella situación y tener que volver a su país. No se si será representativo pero es un dato cierto del que puedo dar fe y ahí está. La mayor parte de esas ideas antiespañolas que se dan en la izquierda española, forman parte de una construcción ideológica hecha adrede para destruir cualquier vestigio de orden y prosperidad que no se sustente en el progresismo. Se ha construido un anti-ideal con el mero objeto de poder construir sobre el solar de la España destruida, un nuevo concepto de sociedad. El problema es que ese anti-ideal se construye desde las propias instituciones, universidades y escuelas, y así se transmite luego a todas las capas de la sociedad. Es muy difícil combatir racionalmente contra ello sin que le caiga a uno el estigma de facha, caverna, atrasado o cualquier otra barbaridad más porque lamentablemente se trata de un combate contra el orden moral establecido.

No, no me parece una crítica elitista, sino que refleja una realidad evidente, aunque a mi humilde entender incompleta. La imagen siempre ha tenido una componente banal. Ya en la Biblia Dios prohíbe al hombre hacerse imágenes de lo que está arriba en el cielo y abajo en la tierra, y esto creo que tiene un significado concreto ya que la imagen cercena una de las cualidades más poderosas del ser humano, su imaginación. La imagen es capaz de fijar en nuestra memoria, un estado de las cosas que en realidad es variable, diverso y circunstancial, y por tanto nos sustrae de enriquecernos el entendimiento con dicha diversidad. Esa misma imagen de la Plaza Mayor de Salamanca que aparece en el artículo, vista en vivo no evoca lo mismo a un turista japonés que a un americano, ni a un salmantino de izquierdas que a uno de derechas. Ni siquiera va a significar lo mismo para dos personas de una misma familia que la visiten en el mismo momento del día, sin embargo, cuando la imagen se fija en un papel o en un archivo digital, aislada del observador, de su contexto y del ambiente cambiante, pasa a convertirse en una especie de prototipo de lo que debe ser y significar dicha plaza para todo el mundo. Trataré de explicarlo con un ejemplo más concreto. Soy catequista de confirmación en mi parroquia, y por ese motivo ayer conversaba con un grupo de jóvenes de entre 17 y 18 años, sobre como imaginaban ellos a Dios. Todos sin excepción, tenían hecha una imagen de Dios, fundamentada en la imaginería del arte sacro. Más o menos la mayoría lo imaginaban como un anciano de largas barbas, con un triángulo en la cabeza y los brazos abiertos, que desde las nubes observa cuanto ocurre en el mundo, lanzando a veces rayos a quienes no actúan como él quiere. Si uno escribe Dios en Google y busca por imágenes, esa es exactamente la imagen mayoritaria que devuelve el buscador, completamente distorsionada con respecto a la realidad, y por tanto distorsionadora del entendimiento humano de Dios. Transmitir el ser, el amor y la voluntad a Dios desde esa perspectiva, es francamente una tarea muy difícil. En realidad, puede decirse que se trata de un hecho limitante, tanto para este caso concreto de la religión como para muchos otros campos de la realidad humana. Y aquí es donde debería entrar el arte como expresión creativa y diferenciadora, capaz de aportar una construcción ideal más sólida y evocadora de la que aporta la repetición incansable de imágenes similares. En el caso que comentaba de estos jóvenes, me veo en la obligación de elaborar una imagen más perfecta de Dios que la que ellos han heredado, para romper las limitaciones que aquella tiene y aunque en su día sirviese para transmitir una determinada idea de Dios adaptada al entendimiento de otra época. Paradójicamente, el arte es aquello capaz de evocar trascendiendo la banalidad, pero que el tiempo acaba convirtiendo en banal, ya que la vida es cambiante y todo lo que hoy es singular mañana se transforma en plural. La imagen banaliza tanto a Dios, como a la Plaza Mayor de Salamanca o lo que se quiera dibujar. Sin embargo, nuestra realidad se ha configurado en torno a las imágenes, y por tanto las necesitamos para construir una idea de la realidad en la que nos movemos, eso es algo que no tiene vuelta atrás salvo que ocurra un cataclismo que nos cambie por completo toda la realidad existente. Hasta las sectas y religiones más literalistas con respecto a ese mandato bíblico, han elaborado diferentes formas de imaginería, necesarias para construir su mundo de ideas. Y como todos vivimos en alguna medida en el mundo de las ideas, es inevitable que, a medida que la técnica permite que hasta el menos avezado pueda elaborar imágenes, hoy estas se multipliquen hasta la saciedad banalizando más y más ese mundo ideal en donde se mueve el ser humano. La banalización de la imagen, ya sea fotográfica o pictórica, no se da tanto por la profusión de artefactos capaces de captar imágenes, como por nuestra multiplicidad y necesidad de captarlas para expresar así los sentimientos, emociones o deseos que nos evocan. Dicho de otra manera, necesitamos compartir nuestro particular mundo de las ideas para sentirnos parte de una comunidad, y eso provoca la multiplicación de imágenes como comunicadoras de ese mundo. Yo lo veo como un árbol en flor, donde cada imagen es una flor que invita la polinización mediante el deleite de su néctar, pero donde solo algunas, las mejores, se convertirán mañana en frutos de donde surgirán nuevos árboles o construcciones ideales. Y como en todo árbol, creo que en este de las imágenes digitales que lo inundan todo, también llegará un momento en el que las flores marchitarán dando paso a frutos reales. Hay una máxima entre los fotógrafos más tradicionales que dice que: "Toda fotografía que no se imprime, no es más que un proyecto inacabado". No sé si habréis visto la película El Último Samurái, una de las mejores películas que a mi entender ha dado el cine, donde se narra de manera excelente la desaparición del orden tradicional. Hay una escena sonde Katsumoto le muestra a Algren su inquietud poética, explicándole que está escribiendo un poema sobre la flor perfecta, como alegoría de la vida, añadiendo al respecto que es algo muy raro y que quién dedique su vida a buscar una sola, no habrá malgastado su vida. Cuando al final de la última batalla Katsumoto muere, antes de morir encuentra el verso que le faltaba para completar el poema de su vida, y dice mirando a unos cerezos florecidos que se ven al fondo: "Perfectas...Son todas perfectas". Esta publicación ha sido promocionada como contenido independiente

¡Hombre! Tanto como ingeniero jefe no, si acaso un encargado más de mantenimiento y decir eso ya sería excesivo . Lo que ocurre es que para mí, el cristianismo no se fundamente en ninguna leyenda que con el tiempo se haya convertido en realidad sino que, se basa en los hechos concretos protagonizados por una persona determinada, que luego han dado origen a una evolución histórica de la humanidad, de otro modo imposible sin aquellos hechos ya que, aportan una visión y entendimiento del ser y de las cosas inexistente hasta entonces. Las leyendas surgen y operan sobre la base de un hecho real que luego se adorna fabulosamente y sirve de marco evocador para la propagación de determinados conceptos e ideas. Hasta aquí el cristianismo podría considerarse de alguna forma legendario pero, por mucho que se quiera dibujar la figura de Jesús con trazos de leyenda o mito (según se le considere hombre o Dios); por muy adornados fabulosamente que estén los hechos de la Iglesia a lo largo del tiempo; por más que se se quieran interpretar las palabras y narraciones que hilvanan y explican la historia de la cristiandad, es decir, por muy creyente, excéptico o incrédulo que sea uno, la historia de Cristo, de la Iglesia y de la Biblia, por este orden, demuestran una mutación de la vida a nivel planetario, que se da en "el plano suprabiológico", se inicia en la Palestina de hace dos milenios y recrea desde entonces todo el orden moral y material existente, sirviendo de fuente de inspiración para personas, familias, pueblos, sociedades, naciones e imperios. Creo que hablamos de una historia con suficiente potencial inspirativo en si misma como para que no necesite de otros añadidos que nosotros queramos proponer ahora al margen de la realidad. ¿Para qué íbamos a necesitar la inspiración de unos "pueblos bárbaros" que sembraron de terror la gran masa continental cuando somos miembros del pueblo que ha dado origen a la civilización del Nuevo Mundo? Dicho de otro modo ¿Qué sentido tendría beber de los charcos cuando podemos tomar agua del manantial?

Dados los intereses ideológicos y las tendencias sociales actuales, es posible que no se haya conseguido y de que, en caso de que así hubiera sido, luego en el debate parlamentario, esa propuesta no lograra un respuesta satisfactoria. No estamos, lamentablemente, en el mejor momento para lograr sacar adelante una iniciativa así, ojalá me equivoque. En todo caso y como muy bien ha expresado el compañero don Fernandito, pienso que esto debe ser una apuesta a medio y largo plazo pues no depende tanto de la voluntad política actual o de la reclamación de leyes más justas, como de ser capaces de inspirar un sentido de patria y unidad que lamentablemente hemos pérdido, y que no se consigue solamente con medidas de este tipo aunque sean muy necesarias. O somos capaces de alentar un espíritu de unidad nacional, que nos permita entender por qué es tan importante preservar nuestro idioma de la vehemencia de los diferentes nacionalismos, o estamos abocados a ir viendo como poco a poco nuestra lengua común, se confunde o disuelve bajo una falsa concepción de quiénes somos, completamente dividida y desnortada. Desde mi personal punto de vista, el objetivo primordial debería ser la recuperación del espíritu de patriotismo que nos une, y que lamentablemente hemos pérdido y está en el origen de problemas como los que trata de abordar esa propuesta legislativa, o de muchos otros que también nos afectan. Se trata de recuperar el "quiénes somos", sin imposiciones ni patrioterismos pero con estraordinaria firmeza pedagógica a la hora de identificarnos como pueblo unido históricamente, bajo una misma concepción y lengua. En caso contrario, creo que todo esto no serviría tampoco de nada. Es mi opinión.

Completamente de acuerdo. Las dos premisas que expones para definir el maquinismo son absolutamente falsas, ni todo lo que puede hacerse con una máquina tiene necesariamente que ser hecho por éstas, ni una máquina tiene por qué hacer siempre las cosas mejor que un hombre. Además, la máquina es un producto de la creatividad humana y por tanto, cualquier cosa que pueda hacer una máquina, esencialmente y en realidad está hecha por un hombre. El escritor del artículo no ha hecho más que automatizar su proceso de elaboración literaria, pero el autor sigue siendo él aunque sus novelas las escriba ahora una máquina. En cambio yo si creo que el arte puede convivir con las máquinas, de hecho lo lleva haciendo desde los orígenes mismos del arte y la tecnología, y no recuerdo ahora de ninguna disciplina artística que haya desaparecido como consecuencioa de la máquina. Es más, creo que la necesidad artística es tan connatural al hombre como la de crear máquinas; ambas son diferentes formas de su misma expresión creativa y por tanto pueden convivir mientras exista el hombre. El peligro es lo que tú mismo mencionas, y con lo que yo también estoy de acuerdo, de que el hombre debe resistirse a, yo diría dominar, su propia creación tecnológica para que pueda seguir siendo el señor natural del que dependen arte y tecnología. No podemos dejarnos desplazar ni por las novedosas concepciones del arte que nos apartan de la realidad de quienes somos, ni por las brillantes invenciones tecnológicas que pueden acabar por someternos a un dominio del que no dependemos. Nuestra obligación es siempre dominar arte y tecnología, en cuyo dominio podemos encontrar también nuestra perfección.

El mito del Preste Juan en principio no es sino una referencia europea a la dimensión universal de la Iglesia extendida tras los viajes de los primeros apóstoles que, supuestamente llegó a tomar cuerpo en Oriente de la mano de un virtuoso gobernante cristiano descendiente de los Magos de Oriente. Posteriormente es cuando se identifica más propiamente con el área de influencia del nestorianismo pero, hay que mencionar que el nestorianismo fue una herejía condenada por la iglesia, que posiblemente sucumbió ante el embate del imperio mongol como consecuencia quizás de la debilidad de su estructura, ya que tenía una fuerte componente gnóstica y por tanto competía también contra la la unidad del propio mundo cristiano occidental del que había sido desterrado, además por supuesto de contra la naturaleza guerrera e imparable de los mongoles. En todo caso hay que diferenciar la leyenda, originada supuestamente por los viajes de Santo Tomás, de la realidad del nestorianismo y su posterior caída ante los mongoles. De todas formas, creo que es conveniente establecer el orden correcto de las cosas para entender cómo funcionan y por ello pienso que no pueden ni deben englobarse los conceptos de "salvación" cristiana e "imperio" bajo una misma categoría ya que referencian diferentes planos de la realidad, me explico. La salvación universal de las almas que predica la cristiandad, se fundamenta en la idea de la eternidad del alma y en la necesidad de alcanzar un estado de gracia, perdido tras el pecado original, que permita alcanzar la santidad (felicidad) para ser así en ella tras el umbral de la muerte. Dicho de otro modo, la salvación del alma es el anhelo humano de bienaventuranza eterna e infinita, y no depende de una organización política, territorial o de cualquier otro modo humana, sino fundamentalmente de la voluntad substancial del ser que dota de identidad el alma humana (la voluntad de Dios), así como de la respuesta de la propia alma a dicha voluntad manifiesta. Pero el imperio, entendido como organización política de diferentes pueblos y culturas unificados bajo un mismo dominio, representa una realidad material y organizativa meramente humanas, que puede llevar implícita o no esa idea de salvación pero que en ningún caso es determinante para su consecución. Dicho en términos concretos: La salvación no depende del imperio sino al revés. La propia universalidad del imperio, depende de su capacidad para responder afirmativa y efectivamente a dicho deseo-necesidad universales de bienaventuranza. A mejor respuesta, mayor extensión y durabilidad tiene un imperio, y esa fue la gran virtud del imperio español que supo responder durante siglos, sobre diferentes culturas, a la necesidad humana de bienaventuranza presente en todas ellas por ser universal. Pero no lo hizo por méritos propios sino porque supo organizarse en gran medida según los principios universales de justicia y caridad de la fe católica, que luego otros han utilizado para estructurar eso que llaman los derechos universales y afianzar así el imperio actual. La salvación del alma es universal (católica) en la medida que responde al deseo-necesidad de cualquier ser humano en cualquier tiempo y lugar mientras que, un imperio puede ser universal en la medida en que alcance a extender mayormente su dominio respondiendo a las necesidades humanas universales, materiales y espirituales. En esencia, el imperio puede ser universal o no ya que depende de la voluntad concreta de un tiempo determinado y unos protagonistas concretos mientras que, la salvación del alma es intrínsecamente universal en tanto que responde a la necesidad fundamental de trascendencia (salvación) de toda persona humana, sea ésta consciente o no de dicha necesidad. El imperio español no se inicia como recubrimiento del Islam, tal como dices que señala Bueno sino que, es la puesta en práctica del mandato evangélico de "ir y anunciar la salvación a todos los pueblos", hecho seis siglos antes de Mahoma y, tal como ya ocurriera anteriormente en el imperio romano, aprovecha las estructuras organizativas anteriores para propagarse. Posteriormente y a medida que el imperio español compite con otros imperios que confunden el entendimiento humano de salvación difundido por los evangelizadores católicos, suma enemigos territoriales y pierde también su capacidad de respuesta a la necesidad universal señalada, es decir abandona sus virtudes, esos otros imperios pasan a ocupar la estructura organizativa de aquél hasta configurar lo que hoy denominas estructura talasocrática otanista. La unidad universal cristiana no se postula como realizable a partir del imperio mongol ni de la unidad de ningún otro imperio, eso es una falacia, sino a raíz de la fe católica en la comunión (común-unión) en Cristo, que en ocasiones ha sabido aprovechar las estructuras organizativas de los imperios para extenderse pero que, en ningún momento ha dependido fundamentalmente de estas sino de la propia fe cristiana, tal como demuestra su existencia en aquellas organizaciones político administrativas donde ha sido duramente rechazada o incluso perseguida. En resumen, la fe católica y en consecuencia su salvación, no dependen de ningún imperio universal, aunque podría decirse que lo pretende, sino que la propia existencia de dicho imperio depende de su capacidad para responder a las necesidades universales orientadas por la fe católica. Por tanto, no se trata de que la fe católica deba adaptarse a una estructura imperial actual o histórica para sobrevivir, sino que los imperios actuales o futuros sepan adaptarse a la propia revelación de la fe católica si es que desean sobrevivir y ser perdurables. Alguno pensará que esta última afirmación quizás sea un atrevimiento estúpido propio de un ignorante, lo comprendo, pero invito a comparar la durabilidad y presencia de la fe católica en el mundo con la de cualquier imperio conocido para entender por qué el imperio siempre ha dependido de la fe y nunca al revés. A diferencia de lo que pueda parecer el imperio siempre fue, incluso antes de la revelación cristiana, el huésped parásito del orden universal que posteriormente revela la concepción católica, siendo está el camino purificador de los imperios y no el parásito que algunos pretenden hacer ver.

Yo debo reconocer que le pego a todo. Me gusta toda la música capaz de inspirarme buenos sentimientos y como la lengua inglesa, más allá de la escrita, ni la hablo ni la entiendo, con la música anglo me quedo con la melodía y tan feliz. A veces hasta yo mismo le pongo la letra según lo que me inspire. Lo mismo me pasa con otras lenguas pues, fuera del español o del valenciano, no hablo ninguna otra excepto un poquito de francés por lo aprendido en los años de escuela e instituto. Para mi la música es un lenguaje universal, como el arte, capaz de inspirar armonía, orden, belleza, sentimientos nobles... y creo que por eso debería estar fuera de toda contienda cultural, aunque desgraciadamente no lo está.

Lo de la paganización de las fiestas de Todos los Santos y de Difuntos, sin duda es una más de las crueldades culturales a las que el imperio anglo protestante ha sometido al mundo católico, que se ha hecho más vehemente si cabe en hispanoamérica dado el interés de USA en controlar el resto del continente. Pero de lo que no cabe ninguna duda es de que Halloween tiene una raíz católica. Para no extenderme yo, reproduzco a continuación un artículo que recopilé hace ya algunos años donde se explica el origen católico de la fiesta, incluso del propio nombre "Halloween". Otra curiosidad que se puede añadir es la del origen de los disfraces y la costumbre del truco o trato tan extendidos hoy en Europa y América, que sin embargo tiene un origen protestante, anticatólico y antiespañol. Se basa en la "Noche de Guy Fawkes", una tradición inglesa que conmemora el fracaso de la "Conspiración de la pólvora" de 1605, que fue una rebelión católica contra el gobierno de Jacobo I de Inglaterra, en la que un grupo de católicos encabezados entre otros por Guido Fawkes, antiguo combatiente de los tercios españoles en la guerra de Flandes, intentaron sin éxito volar la sede del Parlamento londinense en el palacio de Westminster, para matar al rey protestante y entronizar así a la princesa católica Isabel Estuardo que estaba en la línea sucesoria. En aquella rebelión también participaron algunos españoles que actuaron por cuenta propia ante la negativa de la Corona española de apoyar la revuelta, dada la paz firmada con Inglaterra tras la guerra de Flandes. La rebelión fracasó debido a que el Parlamento no pudo abrir cuando los conspiradores tenían previsto dinamitarlo, dada la epidemia de peste negra que estaba asolando Londres. Sin embargo fueron descubiertos y tras largas torturas confesaron sus intenciones y fueron condenados a muerte ignominiosa. Un decreto real ordenó a partir de ese año, celebrar la salvación del rey inglés con espectáculos pirotécnicos y hogueras donde se quemaban en efigie muñecos que representaban originalmente al Papa aunque posteriormente a Fawkes. La noche del 5 de noviembre, los niños se enmascaraban e intercambiaban esos muñecos por peniques con los que se adquiría la pirotecnia y los elementos de las hogueras que luego se utilizaban para quemar la memoria del catolicismo, en una especie de exorcismo anticatólico en el que se pretendía enviar a las llamas del infierno a los católicos. La macabra costumbre del "penny for the Guy", que se inició en Londres, se propagó rapidamente a otras ciudades de Inglaterra, donde comenzó a mezclarse con conmemoraciones a los martires protestantes caídos en las persecuciones de Maria Tudor, y con el paso a las colonias americanas, estas vengativas tradiciones se convertirían en una de las costumbres más populares de la noche de Halloween que hoy todos conocemos y nuestros niños festejan alegremente en los colegios, bajo la supina ignorancia de la mayoría de sus profesores, muchos de ellos católicos.

¿Por qué Puerto Rico se despuebla? ¿Cómo son las relaciones actuales de Puerto Rico con EEUU? En este video se ofrecen algunas respuestas.

Perdona que disienta Gerión pero no termino de ver esa conquista espiritual de Europa que mencionas, como un beneficio cierto para la propia Europa. No comparto que la expansión del imperio mongol pueda suponer una visión universal deseable y realizable en nuestros días. A lo más que se me asemeja es a la visión imperialista que los USA han desarrollado desde los atentados de Nueva York, sometiendo pueblos y naciones mediante la guerra, aunque sin las virtudes guerreras de los propios mongoles pues, el único espíritu que mueve ese imperialismo americano actual no es otro que la deificación del dinero.

Entendido así, yo tampoco estoy a favor. La maquina debe servir al hombre y no al revés. Me refería más a la tecnología como producto de la creatividad humana encaminada a liberarlo de muchas de sus propias ataduras, que a su uso para sustituir al hombre por la máquina. Por cierto, lo de tu amigo no es una rareza, mucha gente piensa así pero creo que puede ser más por ignorancia suya que porque en realidad la pintura hoy no sea relevante. Lo que ocurre es que en el ámbito comercial, efectivamente la fotografía ha conquistado gran parte del territorio que antes ocupaba la pintura, pero eso se debe nuevamente a los mismos intereses de mercado que hablábamos antes. Es mucho más económico comprar yreproducir un millón de copias fotográficas que pagar un millón de pinturas a sus autores, que por otra parte siempre han estado mal pagados salvo excepciones. Así que lo normal hoy en las casas es ver fotografías colgando de las paredes, cosa que mueve a otras personas a considerar la compra de fotografías en lugar de pinturas.

Pero es que eso no deja de ser un mal uso de la tecnología, o mejor dicho, de la creatividad humana que en ese caso de los móviles puede haber inventado un artefacto para tener controlada la libertad humana. Volvemos a lo mismo, el móvil no es el problema sino los intereses y el mercado que hay detrás de los móviles. De todas formas no creo que la fotografía acabase con la pintura de hecho, gracias a la tecnología y a los avances sociales que ha permitido, mucha gente dispone hoy de un tiempo que antes no tenía y dedica en muchos casos al dibujo, la pintura u otras artes plásticas que permiten trascender la dimensión meramente terrenal del hombre. Hoy se pinta mucho más que hace siglos y el aprendizaje y técnicas pictoricas están en disposición de muchisima más gente que en el pasado. Y lo mismo ocurre con la fotografía y los móviles, puede que estemos sobesaturados de "fotografía móvil" pero gracias a la difusión de la fotografía sobrevenida por el uso de las cámaras en los móviles y el desarrollo de la tecnología fotográfica, hoy en general hay un nivel fotografíco muchísimo más elevado que por ejemplo hace treinta años, y de esto puedo hablar con conocimiento de causa porque es mi profesión. Si el maquinismo expulsa al hombre de su lugar natural, no es porque la máquina sea más veloz, más inteligente o más eficiente que el hombre, excusas estas que se emplean para imponer el maquinismo sino, porque los intereses del hombre tras la máquina están expulsando al propio hombre que se ve desplazado por estas. Son esos intereses los que hay que combatir más que las máquinas en si mismas. Es como en las guerras, lo que realmente mata no son las armas si no los intereses de quienes las usan o fabrican.

De otro lado yo no creo que el maquinismo tenga que estar forzosamente peleado con el arte. La tecnología permite hoy nuevos medios de expresión artística y eso no impide que se siga pudiendo hacer arte en piedra o sobre un lienzo. Es más, si lo miras detenidamente, lo que ocurre es que , bien utilizada, la tecnología permite la ampliación humana de su expresión artística. Hoy día conviven sin problemas la pintura, la fotografía y el cine, por ejemplo, y se ejecutan muy buenas obras en las tres disciplinas que permiten transmitir ideas y expresiones que antaño eran muy difíciles de transmitir. Mira por ejemplo la importancia que ha tenido la fotografía en la sensibilización sobre muchos temas sociales que antaño pasaban inadvertidos o eran tomados como cosas lógicas: pobreza, injusticia, enfermedad, guerra…O la que tiene el cine en la difusión de la cultura, hasta el punto que USA debe en gran medida su liderazgo mundial al uso que ha sabido hacer del séptimo arte. Es decir, el problema no es el maquinismo sino el mal uso de la tecnología. El maquinismo, el uso de la tecnología para sustituir la labor del hombre, solo es malo cuando los intereses que le mueven sustituyen al propio hombre. Pero puede ser una bendición si libera al hombre de sus cargas pesadas, permitiéndole dedicarse a aquellas tareas para las que siente vocación de servicio, o en el peor de los casos superar las dificultades que convierten su vida en un infierno. Lo que hay que dominar no son las máquinas o el arte, que a fin de cuentas proceden ambas de la creatividad humana y por tanto dominarlas sería como dominar la creatividad de los hombres. Lo que verdaderamente hay que dominar son los intereses de mercado que se hayan tras el arte o las máquinas, poniendo a ambos al servicio del dominio de la humanidad.

No creo que el debate vaya por ese camino Gerión. Lo que critica Lesper no es la existencia del arte contemporáneo per se, sino la falta de arte en dichas manifestaciones. No se trata de volver al arte tradicional sino de no permitir que los convencionalismos e intereses del mercado, en este caso del arte, destruyan el verdadero arte y por tanto la creatividad humana. Eso se puede extrapolar por ejemplo al campo de la política donde, casi todo se supedita hoy a los convencionalismos e intereses de los mercados que de alguna manera dictan el rumbo de las políticas económicas y sociales, privando así a las sociedades y al propio ser humano de su capacidad de hacer verdadera política.

A fin de animar a la participación de aquellos puertoriqueños que nos puedan leer, y sobre todo para fomentar el conocimiento sobre este pueblo hermano, dejo este breve video que recoge algunas curiosidades poco conocidas por lo común sobre Puerto Rico.

Pues sí, yo también pienso que el olvido de Puerto Rico por parte de España es algo que merecería ser tratado más profusamente. Supongo que las circunstancias de la historía llevarían a entender que lo mejor entonces era olvidarse de la isla pero, los años han pasado y hoy las cosas ya no son las que fueron ayer, por lo que se pueden abordar los temas de una forma diferente y con una perspectiva que nos permita recuperar, al menos la memoria histórica común que tenemos, y desde esa base muchos otros aspectos que conduzcan a un mayor acercamiento entre ambos pueblos. Sería estupendo poder contar con la participación de algún puertoriqueño que nos acercase la impresión que de España se tiene allí, y poder conocer si, desde su perspectiva, creen posible algún acercamiento futuro.

¿A qué te refieres con los que podrían decir algo? ¿Os están discriminando desde algún grupo político?

¿Qué tal va esa recogida de firmas? ¿Finalmente se logrará llevar a pleno la ILP?

La esencia y el final de toda esa amalgama de movimientos identitarios es fraudulenta pues, aunque todos ellos coinciden en su antieuropeísmo, en gran medida puede que incluso justificable, sin embargo el trasfondo suele ser xenofobo y por tanto incompatible con el perdón de las deudas, necesario entre naciones para extinguir la actual unidad económica. Todos se quieren salir de Europa pero ninguno está dispuesto a asumir el balance negativo de la deuda contraída por sus vecinos, lo que no conduce a otro escenario que al de la confrontación final entre quienes hoy son aliados.