Dejo un breve artículo, publicado en 1935 en un periódico gijonés perteneciente a Acción Popular, que me llamó la atención en su día. Realiza una crítica a mi juicio brillante de la decadencia moral de nuestro siglo y toca aspectos como el americanismo, el deportismo, el desnudismo, la disolución social que transmiten la música y la literatura modernas, la fabricación en serie, el utilitarismo y el individualismo. Todo ello resultaría de abandonar la caridad y la fe católica para sustituirlas por la creencia en la infalibilidad de la razón.
A mí me parece que este artículo es plenamente vigente. Lo que denuncia se puede decir igualmente de la sociedad actual, casi un siglo después. Nada ha cambiado desde entonces. Se ha añadido algún peligro nuevo, pero en el fondo son peligros que ya estaban contenidos en esta crítica de 1935.
También es interesante ver que a la derecha de aquel entonces le preocupaban cosas como el americanismo, el culto al físico y al deporte ("deportismo"), el desnudismo, el industrialismo homogeneizante, la cultura del confort y del utilitarismo, el individualismo como disolvente de la sociedad y del arte. ¿Dónde quedaron todos esos temas en la derecha actual? ¿Qué pasó con todo este bagaje cultural y filosófico de la derecha? ¿Se perdió en el limbo?
También lamenta el articulista que muchos católicos sólo practican su Religión de forma externa y han abandonado la caridad, lo que puede explicar la apostasía de las masas y el auge del comunismo ateo. ¡Vaya, un católico que no explica la deriva ateo-comunista únicamente mediante la demonización y la búsqueda de chivos expiatorios, sino que incluso entona un mea culpa por la parte que le toca! ¡Tiene que ser un rojo, como el Papa Francisco! Mejor hacerle caso a Jiménez Losantos y Julio Ariza con sus "guerras culturales" de mierda, que esos sí que saben y además son bellas personas.