Protección contra las fuerzas oscuras: la Z del ejército ruso resultó ser un antiguo símbolo eslavo
La letra Z en los cascos de los equipos del ejército ruso se ha convertido en un símbolo tácito de nuestras tropas. Sin embargo, resultó que esta carta tiene una larga historia. El hecho es que resultó ser un antiguo símbolo ruso.
La letra Z era la novena en el alfabeto eslavo antiguo. Todavía se usa en nuestro país en el alfabeto eslavo eclesiástico. Esta letra se llama "tierra". Desde nuestro propio alfabeto civil, la Z ha sido descartada durante mucho tiempo, porque esta letra era una verdadera defensa contra las fuerzas oscuras.
El hecho de que la letra Z sea un símbolo protector de los eslavos ya está indicado por su propia ortografía. La línea superior describe el Cielo, la inferior, la Tierra. La línea diagonal cruza el espacio entre el Cielo y la Tierra, cerrando el paso al poder oscuro. No es de extrañar que fuera la "Tierra" la que las fuerzas de la oscuridad expulsaron de nuestro alfabeto.
Recordemos que la letra Z hace alarde del equipo del ejército ruso, realizando una operación especial para desnacionalizar y desnazificar Ucrania. Además, en los costados de los vehículos militares rusos también se usa la letra V. El símbolo Z se ha vuelto tan popular en Rusia que tanto las autoridades estatales como la gente común rusa comenzaron a usarlo, haciendo calcomanías con esta letra en sus automóviles.
LA BBC CRITICA LA VERSIÓN OFICIAL INGLESA SOBRE LA ARMADA «INVENCIBLE»
en Memoria de las Españas
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Inglaterra no derrotó a la Armada española, llamada “invencible” por los ingleses. La BBC en un reportaje de Lucy Worsley, dice que aquel hecho «está repleto de exageraciones, distorsiones y algunas grandes mentiras». En el documental se dice que «los ingleses queremos pensar que Inglaterra derrotó a España. Pero eso no es tan simple».
Una tremenda campaña publicitaria en Inglaterra y Europa, apoyada por el protestantismo, recorrió el continente y convenció a muchos de esa victoria. Años después fue utilizada por políticos y artistas ingleses, como Thatcher o Churchill, para estimular el espíritu patriótico británico. Pero lo cierto es que España siguió siendo un imperio medio siglo después de aquel hecho de 1588. Isabel I quiso presentar esta batalla como el triunfo del protestantismo sobre la Iglesia católica, pero lo cierto es que su pretensión era arrebatar a España el dominio sobre América.
La Armada fue vencida por las tormentas, como me enseñaron en el colegio. Quién si fue vencida fue la llamada contra armada organizada por Isabel I, que, capitaneada por el pirata Drake, tenía como misión destruir la flota española, colocar un rey portugués en Portugal, entonces perteneciente a la corona española y monopolizar el comercio con las indias. Más de 20.000 ingleses murieron, pero aquella derrota no se enseña en los libros de historia ingleses.
Acaba el documental con estas palabras: «La historia de la Armada Española, contada por los isabelinos y recontada por generaciones desde entonces, ¡tiene un poderoso legado! Ha sido manipulado por monarcas, artistas y políticos durante siglos. Pero sigue siendo un mito nacional inspirador que nos tranquiliza en tiempos de crisis. Se ha utilizado para convencernos de que nuestra pequeña isla puede tener superpoderes. Que somos herederos de una estirpe de líderes serenos e inspiradores. Tan pequeños como nosotros somos, aún podemos desempeñar un poderoso papel en el escenario mundial. Incluso en un momento secular, parece que los ingleses, los británicos, se sienten especiales, marcados para la grandeza. Y sea cierto o no, el drama de la derrota de la Armada nos da la confianza de creer en nosotros mismos. Quién sabe adónde nos llevará a continuación esa potente mezcla de hechos, fantasía y mentiras».