Oleada de disturbios sociales en Francia

[Español 71.112]

Supongo que ya conoceréis la noticia. Yo me acabo de enterar porque he estado un tiempo completamente desconectado de los medios pero hoy, haciendo un repaso de la actualidad, me he topado con esta noticia que, sin ser una novedad pues no es la primera vez que ocurre en esa región, si que me parece delicada dado el cada día más enturbiado clima que hay en torno al tema de la migración y la pugna entre culturas. Os paso la noticia tal como la recoge hoy ABC a ver que os parece:

Cita

La violencia en Nantes amenaza con hacer estallar la bomba multicultural de Francia

Francia teme que Nantes sea un «polvorín» cuya explosión «pegue fuego» a los suburbios de París y otras grandes ciudades, donde los guetos multiculturales son un campo de minas que puede estallar en cualquier momento. Noche tras noche, desde el martes pasado, los barrios de Breil, Bottière, Bout de Pavés, Bellevue y Dervallières, en la periferia suburbana de Nantes, son víctimas del mismo escenario inflamable: cuando cae la noche, bandas de adolescentes y jóvenes atacan a pedradas edificios públicos, coches y comercios, que son apedreados o incendiados. Gendarmes y agentes antidisturbios responden rápida y expeditivamente, neutralizando los estallidos de violencia, que vuelven a repetirse en otro barrio, horas más tarde.

La instrucción del caso de Aboubacar Fofana (22 años), muerto a tiros de un gendarme cuando intentaba rehuir un control policial la noche del martes, añade confusión e incertidumbre.El CRS (miembro de las Compañías Republicanas de Seguridad, antidisturbios) que pegó un tiro al joven de origen magrebí, fichado por la policía, comenzó dando una versión que él mismo ha desmentido días más tarde. Según su primer relato, el autor del disparo mortal habría actuado «en defensa propia» y Fofana habría intentado darse a la fuga antes de atropellar a los CRS que deseaban interrogarlo, con una maniobra «muy brusca» de su coche. En la segunda versión, el joven magrebí habría sido víctima de un «disparo accidental». Según su abogado, el CRS habría reconocido ante el juez instructor que la primera era falsa.

Alta tensión

Los vecinos del barrio donde murió el joven rebaten ambas versiones, denunciando un comportamiento racista del grupo de antidisturbios que deseaba interrogar a Fofana.

Mientras el juez instructor prosigue su trabajo en un clima de tensión emocional muy alta, las filtraciones oficiales solo contribuyen a enrarecer un clima de diaria violencia nocturna. La familia de Aboubacar Fofana organizó el jueves una marcha ciudadana en la que participaron entre 1.000 y 2.000 personas, pidiendo «justicia» a gritos.

Las peticiones de «calma» de familia, autoridades locales, partidos políticos y sindicatos no han conseguido evitar la prolongación indefinida de tensiones y violencias sistemáticas, de intensidad variable, tan incontrolables como imprevisibles.

La información permanente en radio, televisión y redes sociales atiza un clima «ansiógeno» que culmina cada noche, desde el martes, con un rosario de incendios y violencias que pueden percibirse como un incendio mal sofocado.

En Nantes, como en la periferia de París, las bandas de jóvenes (magrebíes y subsaharianos, muy mayoritarios) viven al margen de los códigos culturales, sociales y políticos convencionales. La desintegración familiar y la precariedad más absoluta coinciden con una escolaridad ultradeficiente y una integración muy rudimentaria.

Aquí y allá, las mafias que trafican con seres humanos, estupefacientes o armas ofrecen dinero fácil, la prostitución infantil y adolescente crea «asociaciones» de nuevo tipo, y la violencia callejera se convierte en un «deporte» de nuevo cuño, en detrimento de la seguridad ciudadana más elemental.

La noche del miércoles al jueves, los bomberos de Nantes (285.000 habitantes) recibieron más de mil llamadas de hombres, mujeres o familias que decían sentirse amenazados ante el espectáculo nocturno de los coches incendiados, los comercios asaltados a pedradas o cócteles molotov.

La violencia «low cost» que se propaga por Nantes y su periferia desde el martes se percibe en París y el resto de Francia como un síntoma inquietante. Reaparece el fantasma de un «verano caliente» en capitales de provincia con semejantes problemas multiculturales. Especialista en sociología de los suburbios, Louis de Saint-Amour analiza la crisis así: «Es un clásico en la historia de las crisis de la “banlieue”, desde 2015, cuando el gobierno de la época tuvo que recurrir al ejército para restaurar el orden. El escenario es siempre el mismo. Un incidente, con o sin derramamiento de sangre, mete fuego a estallidos de violencia, que no es fácil sofocar. Nadie sabe si Francia vivirá o no vivirá un verano caliente. Pero el gobierno debiera tomar medidas preventivas».

 

[Vanu Gómez 64.181]

Es un terreno que se ha ido cultivando por hacer regir la política por principios casi exclusivamente de lógica de beneficio empresarial.

Ahora, el problema está trasladado al conjunto de la sociedad.

Los liberales económicos suelen emplear la palabra "colectivista" como insulto. Pero son ellos los verdaderos colectivistas, pues colectivizan problemas con el argumento de la libertad individual, el beneficio empresarial, etc.

Qué hacemos ahora con las segundas o terceras generaciones desarraigadas y no integradas?

Hay que deslindar muy claramente la cuestión del desorden social y el del racismo, aunque existan vasos comunicantes entre ambos.

Yo me posiciono contra las migraciones masivas con el primer punto como argumento, no por el segundo. Es en buena parte una cuestión de números. Como bien nos ilustró hispano en otro hilo, dentro de un mismo país como el nuestro se han producido deterioros sociales que radican en movimientos poblacionales demasiado rápidos y masivos como para ser ordenados adecuadamente.

Si a eso se suma el factor cultural, étnico y racial pues aumentamos el calado del problema.

[Español 71.112]

Estoy de acuerdo sin embargo me gustaría añadir que el problema, como en una enfermedad, no está tanto en las consecuencias como en las causas. Suele tratarse el tema de la inmigración como el de qué postura adoptar ante la llegada más o menos masiva de personas procedentes de otras culturas, cuando en realidad el problema real lo tenemos en las causas que hacen a esas personas buscar otro modo de vida entre nosotros.

De acuerdo en que habrá gente que llegue movida por intereses más o menos espúreos pero a la mayoría, lo que les mueve es sobre todo la necesidad, y hasta que nuestros gobiernos no planteen políticas que permitan a esas personas desarrollarse con dignidad en sus diferentes naciones, el problema de la migración ira cada día más en aumento. No se trata de levantar vallas o quitarlas, ni de establecer cuotas, proporcionar "papeles", alojarlos en campos de concentración u obligarles a aceptar determinadas ideas que forman nuestro pensamiento y sentir como cultura, sino de propiciar que no tengan la necesidad de salir de sus casas e incluso de que aquellos que ya conviven entre nosotros, consideren la vuelta a sus hogares de origen.

Como decía el Papa Francisco en su mensaje de este año para la Jornada Mundial del migrante y el refugido, nuestra acción se debe basar en cuantro verbos: «acoger, proteger, promover e integrar». Y no tanto, aunque también, en la acogida, protección, promoción e integración física de los que ya conviven entre nosotros, verbos que son fundamentales para la convivencia, sino también en acoger, proteger, promover e integrar a esas personas y sus naciones en una sana convivencia internacional que permita el desarrollo mutuo. Desde luego, con las políticas internacionales de base comercial que se dan hoy en el mundo, donde la paz o la guerra, el desarrollo o la miseria, se propician en función de cual genera más riqueza a la potencia dominante -clara herencia del colonialismo protestante-, seguiremos teniendo problemas con los inmigrantes, y como migrantes seguiremos teniendo problemas cuando nos toque salir de nuestras casas.

Hay que darle la vuelta al mundo pero esa vuelta comienza por cambiar la forma de ver y entender la realidad de nosotros mismos.

[elprotegido 13.014]

De acuerdo, Español, pero del mismo modo la Iglesia debe tener un discurso en relación con los inmigrantes inasimilados e inasimilables, que los hay en Europa y en España desde siempre, a lo que se suman algunas oleadas recientes. El catolicismo, con su manera realista de afrontar el mundo, puede aportar las respuestas necesarias en este sentido.

Sabemos que la izquierda ejercerá su usual labor de acoso y derribo, pero ya conocemos todos eso de "elegir entre el deshonor y la guerra...". 

[Español 71.112]

De eso trata todo. Se trata de cambiar el concepto de ver al inmigrante como un enemigo peligroso para tratar de verlo como a un hermano necesitado. Como verías a tu propio hermano en una situación semejante. Cambiando ese concepto, cambia toda la perspectiva y se entiende el problema de otroe modo.

Y para aquellos que simplemente se salten las leyes y la justicia, pues firmeza y mano dura como se debería tener con con cualquier otro delincuente. Eso es como con la mal llamada «violencia de género» ¿es que acaso quien utilice de la violencia contra otra persona, debe ser mejor o peor tratado en función de si es hombre, mujer, negro, blanco, cristiano, musulmán, europeo o africano? No, para todos debería haber leyes firmes y mano dura que corrigiesen las injusticias y devolviesen a las personas erradas a los cauces debidos.

El problema sigue siendo la discriminación positiva o negativa que hacemos en base a conceptos preestablecidos de origen o identidad.  Todos eso de los derechos universales que establecen la no discriminación en función del sexo, creencia etc. no es más que un cuento chino que las naciones modernas han firmado para salir bien en la foto, pero que pocos creen y en la práctica nadie sigue. Hoy se sigue legislando y ejecutando lo contrario.

[Español 71.112]

El problema que hay en la raíz de todos esos disturbios y situaciones semejantes que en ocasiones se dan en nuestras naciones, es que se han establecido guetos donde se ha ido metiendo a aquellas gentes que han sido acogidas, no por su condición humana sino por los beneficios que se obtienen por ello. Y esos guetos, cuando alcanzan cierta masa crítica, acaban por estallar a la menor ocasión pues nunca han dejado de ser y sentirse como personas discriminadas.

[Vanu Gómez 64.181]

Los guetos acaban enquistándose. Gran parte del flujo de personas que van entrando en Europa acaban recalando en esos espacios, especie de callejones sin salida.

Por tanto, es muy irresponsable la mentalidad de hacer pasar gente sin más si no se tiene en cuenta este hecho. Todo ello con independencia de la problemática de origen.

Porque, convendremos, que las personas que acaban sufriendo la guetización de sus barrios es la que acaba formando el semillero de votos y militantes para futuros movimientos xenófobos.

Desde su punto de vista, en buena parte con razón, ellos no tienen por qué ser los sufrientes directos de las decisiones que otros tomaron y desembocaron en problemas que empujaron a los emigrantes a salir de sus países.

El modelo liberal de urbanizaciones de élite social separadas y blindadas del resto -copiado de otros países- inexistente en otros tiempos en nuestro país es algo que facilita mucho la insensibilidad hacia ese problema.

En este sentido es muy interesante ir a las descripciones del Régiment Tradicional que se caracterizaban por la convivencia física entre clases sociales. Extrannaba incluso mucho a los anglos el hecho de que los esclavos en la América espannola vivieran en las mismas casas que los sennores.

Quiero decir con esto que el deslidamiento y segregación por clases ha venido aumentando con los tiempos y hace que una parte de los que se aislan son insensibles a este tipo de problemáticas.

[Español 71.112]

Meter gente sin más no es irresponsable sino simplemente un suicidio, y salvo los sectores progres más radicales,  no creo que nadie abogue por esa vía.  

En lo que no estoy de acuerdo es en la exención de responsabilidad de los nacionales que viven en esos guetos,  al menos de la mayoría de gente.  Claro está que habrá niveles de responsablidad y que unos serán más culpables que otros,  pero la mayoría de gente que hoy se queja de los inmigrantes no dice nada cuando consumen productos baratos cuyo origen son los salarios o condiciones de miseria que se dan en otros países o incluso en el nuestro,   ni se quejan tampoco cuando reciben su pensión o servicios públicos,  en parte pagados con la contribución de esas personas.  Y no te digo ya cuando quien se queja es gente de clase acomodada que sin embargo tiene a una extranjera sirviendo en su casa sin contrato ni seguridad social. Gente que sin embargo no tiene empacho en ir a votar una y otra vez a los partidos de siempre,  que a la postre son quienes perpetúan su situación.  No seamos ingenuos,  el egoísmo o la irresponsabilidad no son defectos sólo de quienes vienen de fuera.  En esta situación casi todos tenemos algún grado de complicidad o culpa. 

[Hispanorromano 71.070]

Tiene razón El Español en que todos tenemos parte de responsabilidad en el fenómeno. Unos más que otros, claro.

Por ejemplo, muchos inmigrantes trabajan en el campo, donde generalmente no queremos trabajar los españoles. Se dirá: "paga un salario más elevado y verás como también trabajan los españoles". De acuerdo, pero ¿estás dispuesto a dejar de comprar en las grandes superficies que exprimen al agricultor? ¿Estás dispuesto a pagar la verdura, por ejemplo, al doble de precio, lo que necesariamente implicará que tengas que dedicar una mayor parte de tu presupuesto a la compra de bienes básicos y ya no puedas comprarte un móvil de mil euros cada año? Yo sí estoy dispuesto, pero no sé si todo el mundo que brama contra los inmigrantes está dispuesto. Apuesto a que son los que más protestarían.

De todas formas, creo que está muy exagerado el tema de Francia. No he visto que le hayan dedicado tanta atención en la prensa francesa. El ABC viene publicando titulares demasiado alarmistas, mientras en sus columnas Hermann Tertsch lanza mensajes raciales de lo más chuscos . Creo que todo esto se ha desbocado. Lo del Aquarius habría pasado sin pena ni gloria de no ser porque estamos en un estado de alarma artificialmente inducido desde fuera. Es obvio que tenemos que poner todos los medios para que se detenga este tráfico de barcos en el Mediterráneo, pero el alarmismo y la hipersensibilidad con cualquier noticia relacionada con la inmigración no auguran nada bueno.

[Español 71.112]

Y con todo, al final es una cadena de causas y consecuencias de la que difilmente se puede salir porque también es verdad que, sobre todo para las familias con grandes cargas y rentas bajas, comprar ese tipo de productos ya no es tanto una opción como una necesidad, y a la postre suelen ser quienes habitan en las zonas más deprimidas y con mayores tasas de inmigrantes. Al final, y como siempre, quienes promueven de base estas situaciones son quienes más se benefician de ellas y menos las sufren. Ojala la gente tuviera en cuenta eso a la hora de ir a votar y refrendar una y otra vez a los mismos gestores, aunque cambien de ropajes.

[Vanu Gómez 64.181]

hace 16 horas, Hispanorromano dijo:

Tiene razón El Español en que todos tenemos parte de responsabilidad en el fenómeno. Unos más que otros, claro.

Por ejemplo, muchos inmigrantes trabajan en el campo, donde generalmente no queremos trabajar los españoles. Se dirá: "paga un salario más elevado y verás como también trabajan los españoles". De acuerdo, pero ¿estás dispuesto a dejar de comprar en las grandes superficies que exprimen al agricultor? ¿Estás dispuesto a pagar la verdura, por ejemplo, al doble de precio, lo que necesariamente implicará que tengas que dedicar una mayor parte de tu presupuesto a la compra de bienes básicos y ya no puedas comprarte un móvil de mil euros cada año? Yo sí estoy dispuesto, pero no sé si todo el mundo que brama contra los inmigrantes está dispuesto. Apuesto a que son los que más protestarían.

De todas formas, creo que está muy exagerado el tema de Francia. No he visto que le hayan dedicado tanta atención en la prensa francesa. El ABC viene publicando titulares demasiado alarmistas, mientras en sus columnas Hermann Tertsch lanza mensajes raciales de lo más chuscos . Creo que todo esto se ha desbocado. Lo del Aquarius habría pasado sin pena ni gloria de no ser porque estamos en un estado de alarma artificialmente inducido desde fuera. Es obvio que tenemos que poner todos los medios para que se detenga este tráfico de barcos en el Mediterráneo, pero el alarmismo y la hipersensibilidad con cualquier noticia relacionada con la inmigración no auguran nada bueno.

Este mensaje que pones está directamente relacionado con los hilos abiertos con relación a la despoblación y la necesaria repoblación rural.

Digamos que el semillero de la mano de obra en trabajos más o menos penosos se extinguió con la despoblación rural. Al secarse esa fuente -básicamente en las tres últimas décadas"- es imposible matemáticamente pretender reducir a casi nula la inmigración en nuestro país, menos aún en los llamados trabajos de baja cualificación. Sencillamente los hijos de los que dejaron los Pueblos en los setenta, ochenta, etc... no van a hacer casi nunca los trabajos que desempennaron nuestros padres.

Ahí es donde empieza a forjarse una de las causas del problema demográfico que estamos viviendo...

 

 

[Español 71.112]

De otro lado tenemos el problema de la tasa de reposición generacional negativa en el campo de la economía que es, nos guste o no, un problema muy grave y real. Yo soy de los que piensan que una correcta política de protección y fomento de la familia tradicional resolvería ese problema a medio-largo plazo pero, ni veo voluntad política al respecto -más bien veo lo contrario- ni a medio-corto plazo el problema contributivo tiene otra solución que no pase por un mayor endeudamiento y un incremento de la contribución proveniente de los inmigrantes, con el agravante de que, a mayor deuda mayor necesidad contributiva. Yo ya sé hace tiempo que no voy a tener una pensión digna cuando me llegue el momento, y el futuro que veo para las siguiente generaciones pinta aún peor.

Quizás esa sea finalmente la piedra filosofal que haga reconsiderar la perspectiva política respecto a América, no lo se, pero desde luego a medio y corto plazo la cosa pinta mal y no sería descabellado dejar de mirar tanto los pies de Alemania para mirar un poco más a los ojos de nuestros hermanos americanos, a fin de cuentas estos son más familia nuestra que los teutones, por mucho que los linajes reales vengan de arriba.