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Interesante el parecido entre Jesús e Isaac, la interpretación de hechos símiles entre uno y otro. Es posible que hubiera alguna historia bíblica que también tuviera símiles con otra pero no me viene a la cabeza ahora mismo. Hay muchas cosas en la historia que se repiten con los años. Sobre el ejemplo que hay que dar a los niños/as, es algo que ya he comentado con otras palabras en algún tema de este foro y decir que darles facilidades y quitarles responsabilidades no les ayuda a largo plazo. Si tienes ocasión de enseñarles tareas domésticas como cocinar, limpiar, lavar ropa, etc. no lo dudes: enséñales e intenta inculcarles la necesidad de que cojan responsabilidades. De otro modo, se acomodan y acabas siendo su esclavo y no te valoran como les pasa a muchos padres y madres tristemente. Por supuesto, evitemos conductas poco educativas y actos indeseables si queremos que los hijos/as los eviten ya que copiarán lo que ven desde bien pequeños y de mayores costará muchísimo cambiar ciertas cosas.

El Dios Eterno, desde Beersheba, ahora nos ve: Yavé ve. Yavé nos verá. Presente, futuro, y pasado, pues son hechos verídicos los bíblicos. —————— Abraham, labora, callado, sufriendo enormemente, y no parece que comparta su sufriendo. Madruga, lo prepara él todo. Después debió avisar a sus dos sirvientes, y a su hijo. Su único hijo, su amado (Ya tenemos aquí a Nuestro Señor, Jesucristo). Y con su sufrimiento se encaminan hacia Moriah. Al tercer día, alzó sus ojos y vio el lugar a lo lejos.. Nosotros volveremos a vosotros. Al tercer día Resucitó de entre los muertos, conforme a las escrituras, tres apariciones a los suyos, tres negaciones de San Pedro.. ¿Por qué estaba Abraham tan seguro que volverían los dos? Si los holocaustos eran para Dios, se quemaban. El resto se utilizaba (piel, etc)y se comía, de la pieza ofrecida. ¿Quizás pensaba que su hijo único resucitaría por Dios?, ¿Quizás ni pensaba siquiera, iba en una katarsis que Dios le tenía así, y por eso no se percató de que había un carnero enrolado en unos matorrales, hasta que el Ángel se lo indicó?, ¿O tal vez pensaba, que Dios le permitiría llevarse los restos de su amado hijo único, a sepultarlos?. 22.8b: Siguieron caminando los dos juntos. Yo creo que cuando paran en ese collado, haciendo esperar a los siervos, deja el padre la carga atada al hijo amado (Cruz de NS, hacía su Calvario), pasándole el trabajo duro ahora, que hacia él, a su amado. Te paso mi sacrificio. Ahora somos los dos los que llevaremos esta carga, padre e hijo. Enseguida Isaac, demuestra que en su adn, Dios ha puesto una inteligencia, preguntando por el cordero. Se daría cuenta que era él el cordero, y se dejó atar. De nuevo Jesús, ahí está. Se dejó capturar, ofender, maltratar, crucificar.. Como cordero al matadero. Por tanto, Isaac está dándole a Dios la demostración de que es luz de esperanza, es la promesa. Debería tener entre 24 y 26, suficiente como para rechazar eso, irse, o quedarse. No creo que Dios pidiese un niño para esto. Sino a un joven capaz ya de distinguir y con su bagaje de enseñanza en su pueblo. En esa katarsis, o sufrimiento grande que ciega, el Ángel le dice dos veces: ¡Abraham, Abraham!. ¡Hemme aquí!. Jesús en Getsemaní: ¡Abba, Abba!. Y viene un Ángel de la Agonía, esta vez, no impide nada. Sino que Contempla, este sufrimiento que empieza a purgar a cada persona humana. Para llegar al: Todo se ha cumplido. Con Jesús se lleva a término el sacrificio de Isaac. Una curiosidad, Jesús se fue a un tiro de piedra de sus hermanos discípulos. Recordemos a Agar que se alejó un tiro de arco de la agonía de su carne y sangre, hijo. Ella, bendecida, pero con una genética que no era creada para engendrar la Promesa, pero bendecida igualmente. No pudo ser capaz de aprovecharse aún más, estando con el pueblo de la promesa. Demuestra esto, que es Dios quien escribe sobre nuestro adn, y esto condiciona lo que nuestra vida será. Pero siempre, se nos ofrecerá, para mejorar y estar en ÉL. Nos haya tocado donde nos haya tocado nacer y estar. Dejo la Aquedá. No se la pierdan, es instructiva: https://dialnet.unirioja.es/descarga/articulo/3881453.pdf Y lo más práctico que podemos sonsacar a estos versos, actualmente: PREDIQUEMOS CON EL EJEMPLO A LOS NIÑOS http://mana-ebenezer.blogspot.com/2015/04/prediquemos-con-el-ejemplo-los-ninos.html?m=1 Me ha parecido gran enseñanza para estos tiempos. Léanlo. Cuando lo que decimos no coincide con lo que hacemos, estamos promoviendo en los hijos el criterio propio y la opción; habrá cosas que quizás no afecten en la formación de su carácter y personalidad, pero hay otras que son trascendentales por las cuales yo os digo: mirad bien no sea que el día de mañana no quieran ni servir ni buscar a Dios, ni creer ni confiar en Él; porque sin lugar a dudas, el ejemplo; dice más que mil palabras. En el caso de Abraham tenemos no un hombre perfecto, pero si un hombre de fe y obras. Por la fe; Abraham agrado a Dios y alcanzo grandes promesas, pero también de paso sembró en su hijo, la posibilidad que un día el también por decisión propia buscara al Dios de su padre, y le fueran ratificadas aquellas promesas que su padre había recibido. La obediencia de Abraham a Dios no se limitó a palabras, porque a pesar de lo que El Señor le estaba pidiendo, no reusó ofrecer en sacrificio Isaac su hijo. En esto podemos ver que Abraham enseño a Isaac a entregar a Dios; lo que Él pide en tiempo y el lugar que Él le dice. Este y muchos ejemplos más debieron haber quedado en el corazón de Isaac, que con el correr de los años lo vemos ofreciendo sacrificios, invocando a Dios y teniendo el favor de Él. (Génesis 26: 24,25) Y se le apareció Jehová aquella noche, y le dijo: Yo soy el Dios de Abraham tu padre; no temas, porque yo estoy contigo, y yo bendeciré, y multiplicaré tu descendencia por amor de Abraham mi siervo. Y edificó allí un altar, e invocó el nombre de Jehová, y plantó allí su tienda; y abrieron allí los siervos de Isaac un pozo. Quizás no haya mucho que dejar a los hijos el día que les faltemos, pero créeme que si lograste enseñarles y trasmitirles tu fe en Dios les habrás heredado la más grande fortuna. Todos los días hay la oportunidad de predicarles con el ejemplo. Abraham, Sara, su hijo amado y su pueblo, han comprado un pozo. Y ahora comprarán una cueva y la tierra que la rodea. Su primera compra de tierra. En Capitulo o versos del 23 de Génesis.