Hola a todos los miembros del foro. He estado ausente de las redes sociales durante un tiempo, pero estos últimos días he vuelto a leer algunos de los hilos de este magnífico foro y quisiera dar mi opinión sobre el voto a VOX.
Ahora, después de los resultados, se está diciendo que se ha de volver a aglutinar el voto en torno al PP apelando al miedo, al miedo a que gobierne la izquierda.
Apelar al miedo es una estrategia política legítima para obtener el poder, que es lo que, lamentablemente, interesa a la mayoría de los políticos en lugar de buscar el bien común.
El miedo es un sentimiento humano que sirve de protección ante un peligro. Apelar al miedo es apelar, de alguna forma, a la resignación de que algo no se puede cambiar y, por tanto, es mejor para la salvaguarda personal no enfrentarse a ello. El temor, en cambio, es un sentimiento que nos detiene a hacer algo que pueda causar daño o mal a otros. Al miedo hay que enfrentarse, en cambio el temor no es malo. A modo de ejemplo, un cristiano no ha de tener miedo del mal, ha de enfrentarse a él y no vivir en connivencia con él y tampoco ha de tener miedo de Dios, pues Dios es el Amor Supremo. En cambio ha de tener temor a ofender a Dios con sus actos, puesto que un acto contra Dios implica un acto contra el Bien Supremo y, por tanto, es malo.
Naturalmente entiendo que haya gente que ha votado a VOX por principios y que ahora piense en volver a votar al PP porque tengan miedo a que gobiernen las izquierdas y los enemigos de España, ya que, como he mencionado anteriormente, el miedo es un sentimiento humano. El PP podrá gobernar y, a lo mejor, se evitará un gobierno de izquierdas, pero creo que seguirían cediendo ante el marxismo cultural y haciendo más concesiones a las regiones desleales de España para “tenerlos contentos” apelando a conceptos como el diálogo o el sentido de estado. Es decir, aunque no gobernaran “los malos”, los que gobiernan estarían en connivencia con ellos, porque no ofrecerían ninguna batalla ideológica, sino que asumirían implícitamente las ideas del contrario (Tanto Aznar como Rajoy lo hicieron durante sus gobiernos).
Yo, como votante, me haría una pregunta. Debo votar a un partido por miedo para evitar el peligro de un gobierno que no quiero o debo votar por principios a un partido con el que puedo tener más afinidades en cuanto a ideología, aún sabiendo que es minoría? Yo, personalmente, no votaría al primero por miedo, sino que votaría al segundo por temor a ir contra mis principios si votara al primero, ya que me estaría resignando de alguna manera a aceptar implícitamente lo que no pienso con tal de evitar un mal a corto plazo, además de que estaría renunciando a que se escucharan ideas que comparto en el congreso.
Podrán destruir España (por acción o por omisión) convirtiéndola en una suerte de repúblicas ibéricas bolivarianas, catanazis y bilduetarras, pero tendré la conciencia tranquila de que yo no contribuí a eso ni por acción, ni por omisión.
En cuanto al resultado obtenido por VOX, éste es muy bueno. Hace dos años no los conocía casi nadie y ahora han obtenido 24 escaños y 2,7 millones de votos. Cuando en el siglo VIII España fue invadida por los musulmanes, sólo había un pequeño foco de resistencia en el norte de España formado por “cuatro asnos salvajes” (así se referían las crónicas musulmanas a ellos) que no aceptaron vivir bajo el “yugo musulmán”, se rearmaron “ideológicamente” en torno al cristianismo e iniciaron la reconquista de España, que fue larga, pero lo lograron.
Que conste que no tengo nada que ver con el partido político de VOX (ni soy afiliado, ni tampoco simpatizante), ni tampoco estoy pidiendo el voto para ellos. Yo los he votado en las generales y los votaré en las europeas y regionales, pero que cada cual vote (o no vote) atendiendo a sus criterios personales.