Saltar al contenido

Buscar en la comunidad

Mostrando resultados de las etiquetas 'progresismo'.

  • Buscar por etiquetas

    Indique las etiquetas separadas por comas.
  • Buscar por autor

Tipo de contenido


Foros

  • Corazón Español
  • Foros generales
    • Debate de actualidad
    • La España pendiente
    • Memoria de las Españas
    • Café español
    • Información y soporte
  • 'Corazón Montañés', en el subforo 'Temas nuevos'
  • 'English-speaking community', en el subforo 'English-speaking forum'
  • 'Coração Brasileiro e Luso', en el subforo '· Fórum do Brasil e a Lusofonia'
  • 'Corazón Mexicano', en el subforo '· Foro de México'
  • 'Corazón Puertorriqueño', en el subforo 'Foro de Puerto Rico'
  • 'Corazón Argentino', en el subforo '· Foro de Argentina'
  • 'Fuero de las Alemanias.', en el subforo 'Foro Hispano-Alemán'
  • 'Corazón Católico', en el subforo 'Foro Católico'
  • 'Mundo Republiqueto', en el subforo 'Foro de la comunidad MR'
  • 'Corazón Peruano', en el subforo 'Foro del Perú'

Categorías

  • Tribuna de opinión
  • España
  • Europa
  • Hispanoamérica
  • Internacional
  • Historia y patrimonio
  • Política y economía
  • Religión e Iglesia
  • Geopolítica y estrategia
  • Pensamiento y filosofía
  • Ciencia y tecnología
  • Naturaleza y medioambiente
  • Artes y cultura
  • Información web

Categorías

  • Registros

Categorías

  • Hispanidad y mundo contemporáneo
    • Actualidad y mundo contemporáneo
    • El futuro de la Hispanidad
    • Memorias de la Hispanidad
  • Charla y entretenimiento
    • Arte y cultura
    • Ciencia y tecnología
    • Fe y religión
    • Educación y formación
    • Pensamiento y filosofía
    • Naturaleza y medio ambiente
    • Viajes y turismo
    • Música y cine
    • Deportes y espectáculos
    • Datos y curiosidades
  • 'Fuero de las Alemanias.', en el subforo 'Videos'
  • 'Corazón Católico', en el subforo 'Videos'

Encontrar resultados en...

Encontrar resultados que contengan...


Fecha creación

  • Inicio

    Fin


Última actualización

  • Inicio

    Fin


Filtrar por número de...

Se unió

  • Inicio

    Fin


Grupo


Encontrado 5 resultados

  1. El otro día terminé el libro Política de la familia, de Ferdinando Loffredo, un intelectual fascista que en la posguerra trabajó desde la Acción Católica. El libro es muy recomendable para toda persona que esté interesada en reactivar la natalidad española, pues aborda todas las cuestiones esenciales, desde la Religión hasta el feminismo. Siempre que leo algún libro anoto referencias que luego investigo en internet, pues generalmente me dan pistas útiles sobre multitud de temas. En esta ocasión la investigación me ha llevado por algunos derroteros que creo interesante compartir con vosotros antes de que se pierdan en mi memoria. Tenemos la idea de que la eugenesia es una cosa más bien de derechas. Un profesor de demografía recoge así la historia de la eugenesia en España [introduzco algunas notas en rojo]: El último párrafo no dice la verdad y si lo cito es por no mutilar el escrito. Este profesor de demografía es progresista y, como tiene mala conciencia por la responsabilidad del progresismo en la eugenesia y en los subsiguientes genocidios, se ve obligado a añadir este párrafo final según el cual el franquismo habría continuado con la eugenesia. Primero, se confunde al hablar de César Vallejo Nájera. El tan mentado doctor se llama Antonio, no César, y a poco que uno lea su obra "Eugenesia de la Hispanidad" se da cuenta de que lo que propone en realidad es una antieugenesia. Esto era muy común en la época: se utilizaba el nombre de eugenesia para cosas que, según la perspectiva actual, no son eugenesia. La Iglesia, por ejemplo, decía que la mejor eugenesia era la moral católica. Pero bueno, este tema se puede tratar aparte si alguien tiene dudas. El caso es que tenemos varias realidades comprobadas: Las ideas eugenésicas son introducidas en España por sectores progresistas. Las defienden muy especialmente anarquistas, republicanos y socialistas. Las derechas se oponen radicalmente. Los únicos periodos en los que las que el eugenismo es reprimido son la Dictadura de Primo de Rivera y la de Franco, es decir los dos únicos periodos en que la sociedad y la política giran hacia la derecha. La democracia -y esto no lo cuenta el profesor de demografía- rehabilita la eugenesia con el aborto eugenésico y la esterilización de deficientes. Queda claro que el eugenismo es una idea progresista y no hay ningún estudioso académico serio que discuta el hecho, aunque algunos lo intenten minimizar, como nuestro profesor de demografía, inventando una falsísima eugenesia franquista. En el caso del racismo, el origen progresista e ilustrado también está claro para muchos estudiosos de prestigio, pero pesa mucho la idea de que el racismo sería una cosa de derechas por las asociación que todos hacemos con el régimen nacionalsocialista. Por ello, es algo más difícil encontrar estudios académicos en español que expongan esta raigambre progresista del racismo. Y sobre todo al público general le choca mucho la idea de que el racismo pueda ser algo de izquierdas. Veamos si puede aportar alguna luz esta reseña de un libro sobre el hispanomericanismo durante la Restauración: Tres conclusiones que se pueden extraer de aquí: El "Día de la Raza" lo instituyó el liberalismo de la Restauración y lo mantuvo sin problemas la Segunda República. Es Franco el que lo cambia al "Día de la Hispanidad" con el aplauso de la Falange y de las derechas, que veían ese término mucho más adecuado. Los derechoides que se aferran a la primera denominación quedan retratados en su ignorancia. Quienes empiezan con los discursos raciales son los progresistas, entre ellos los krausistas, pues parten de la misma concepción naturalista y biologicista del hombre que da lugar a la eugenesia. El progresismo está en el origen de todas estas ideologías que reducen al hombre a la animalidad. Los conservadores y los reaccionarios de la época se oponen a esa interpretación racial. Los reaccionarios, como Menéndez Pelayo, exaltan la latinidad española frente a la raza germana, que asocian -con razón- al progresismo y a la barbarie. Habría mucho que hablar sobre estos temas. Y se podrían poner muchos más ejemplos. Pero de momento expongo estos breves apuntes para explicar la raigambre progresista de algunas ideas que hoy han asumido las derechas. Esta publicación ha sido promocionada como artículo
  2. Arthur de Gobineau, quien inventó el racismo moderno y es el padre intelectual de los identitarios (lo sepan o no), basa su famosa obra "Ensayo sobre la desigualdad de las razas humanas" sobre una tesis principal: El auge y la decadencia de las civilizaciones se explica solamente por la composición racial de la nación y, en particular, de su élite. Mientras ésta se mantenga blanca, afirma Gobineau, y sólo entonces, la nación sobrevivirá. El declive de las civilizaciones se explicaría, por tanto, solamente por la "bastardización" racial de la élite blanca. Éste podría ser un resumen bastante tosco y rápido de lo esencial de la obra de este pensador. A partir de ahí, Gobineau se dedica a recorrer todas las civilizaciones humanas una por una y tratando de ligar la caída de cada una de ellas con su tesis central. Tras exponer esta tesis, Gobineau, que no es estúpido, afirma explícitamente su consecuencia directa, que contradice lo que había enseñado siempre la recta filosofía cristiana: La irreligión, la impiedad, las malas costumbres, etc, no son la causa del declive de las civilizaciones. En todo caso, una simple consecuencia de haber mezclado la raza. La tesis de Gobineau, que sienta las bases de todo el pensamiento racista posterior (sin ir más lejos, Hitler la sostiene en el Mein Kampf), se revela, pues, de naturaleza tremendamente subversiva y progresista: Observar las buenas costumbres -como siempre ha enseñado la Iglesia- tiene una importancia a lo sumo secundaria, pues lo que cuenta de verdad es mantener la pureza de la raza. No necesito demostrar que semejante tesis habría sido calificada de delirante e inconcebible por cualquier filósofo escolástico. Todo lo anterior es plenamente asumido por los identitarios actuales -como he dicho, herederos directos de Gobineau- aunque en la mayoría de los casos no han leído a Gobineau. Por ejemplo, considero "progre" todo lo que no sea denigrar a los negros, pero no me hables de la castidad, de la que me burlo en cualquier ocasión. Occidente puede ser todo lo degenerado que quiera si se mantiene blanco. Por concluír, a título de curiosidad, sólo veo dos ideas de Gobineau no asumidas por el identitarismo actual: En primer lugar, Gobineau pone a las razas negra y amarilla al mismo nivel (el del betún) por lo que respecta a sus capacidades. La raza amarilla es retratada con la misma crueldad que la raza negra. Eso contrasta fuertemente con el identitarismo actual, que considera a la raza amarilla como igualmente capacitada que la blanca y a la negra como muy inferior. El motivo se debe probablemente a cuestiones de índole "geopolítica" que interfieren en el asunto. En segundo lugar, Gobineau es un erudito amante de cierto rigor. Y, más importante, es hombre de su tiempo. Por lo tanto, en su obra no vemos aparecer en ningún momento al George Soros o al judío de turno tratando por todos los medios de bastardear a la raza blanca. Nada de "Plan Kalergi": Todos los fenómenos de mestizaje son descritos por Gobineau como procesos espontáneos y en gran parte inevitables, no como llevados a cabo por la acción premeditada de una minoría de poderosos. Esta segunda apreciación enlaza con el hilo sobre las conspiraciones, pues se confirma una vez más que el pensamiento de tipo conspiracionista es de origen recentísimo y que antes nadie pensaba en estos términos. Esta publicación ha sido promocionada como contenido independiente
  3. La obra más conocida de Darwin es El origen de las especies, de la que existen infinidad de traducciones al español. Es menos conocida una obra más tardía, El origen del hombre, de la que apenas se ha publicado alguna traducción en España. Transcribo algunos párrafos que me han parecido curiosos y que no se han comentado mucho en España. Tomo el texto de una edición digital elaborada a partir de una edición española probablemente fechada en 1909. Advierto de que no he leído entero el libro. Tan sólo he estado hojeándolo un buen rato y he creído interesante destacar algunos pasajes. ¿Precursor del animalismo? Animales tratados como hombres y hombres tratados como animales: Pese a que un hombre no se diferenciaría mucho de un mamífero superior o incluso de un insecto, dos hombres de diferente raza podrían ser de especies distintas: Los negros sería una especie de eslabón intermedio entre el hombre blanco y el mono. Hay que celebrar el exterminio de estas razas salvajes en nombre del progreso y la evolución: Malthusianismo con pinceladas de eugenesia negativa; asociación de pobreza con vicio y vagancia; y su opinión sobre los irlandeses católicos en comparación con los frugales y previsores protestantes: Su opinión, sobre España, sobre la Iglesia preconciliar y sobre la Inquisición: De los ingleses sólo tiene buenas palabras. Elogio del "emprendedor" y del imperialismo anglosajón, que considera superior a Grecia y Roma: Darwin: ¿progre o antiprogre? Las derechas de los países protestantes y sus emanaciones, como la Nueva Derecha, se inclinan por esto último y lo adoptan como un referente. Pero antaño el más ultraderechista de los países católicos le habría dicho que está en un error.
  4. elprotegido

    Gobineau: progre y padre de los identitarios

    Arthur de Gobineau, quien inventó el racismo moderno y es el padre intelectual de los identitarios (lo sepan o no), basa su famosa obra "Ensayo sobre la desigualdad de las razas humanas" sobre una tesis principal: El auge y la decadencia de las civilizaciones se explica solamente por la composición racial de la nación y, en particular, de su élite. Mientras ésta se mantenga blanca, afirma Gobineau, y sólo entonces, la nación sobrevivirá. El declive de las civilizaciones se explicaría, por tanto, solamente por la "bastardización" racial de la élite blanca. Éste podría ser un resumen bastante tosco y rápido de lo esencial de la obra de este pensador. A partir de ahí, Gobineau se dedica a recorrer todas las civilizaciones humanas una por una y tratando de ligar la caída de cada una de ellas con su tesis central. Tras exponer esta tesis, Gobineau, que no es estúpido, afirma explícitamente su consecuencia directa, que contradice lo que había enseñado siempre la recta filosofía cristiana: La irreligión, la impiedad, las malas costumbres, etc, no son la causa del declive de las civilizaciones. En todo caso, una simple consecuencia de haber mezclado la raza. La tesis de Gobineau, que sienta las bases de todo el pensamiento racista posterior (sin ir más lejos, Hitler la sostiene en el Mein Kampf), se revela, pues, de naturaleza tremendamente subversiva y progresista: Observar las buenas costumbres -como siempre ha enseñado la Iglesia- tiene una importancia a lo sumo secundaria, pues lo que cuenta de verdad es mantener la pureza de la raza. No necesito demostrar que semejante tesis habría sido calificada de delirante e inconcebible por cualquier filósofo escolástico. Todo lo anterior es plenamente asumido por los identitarios actuales -como he dicho, herederos directos de Gobineau- aunque en la mayoría de los casos no han leído a Gobineau. Por ejemplo, considero "progre" todo lo que no sea denigrar a los negros, pero no me hables de la castidad, de la que me burlo en cualquier ocasión. Occidente puede ser todo lo degenerado que quiera si se mantiene blanco. Por concluír, a título de curiosidad, sólo veo dos ideas de Gobineau no asumidas por el identitarismo actual: En primer lugar, Gobineau pone a las razas negra y amarilla al mismo nivel (el del betún) por lo que respecta a sus capacidades. La raza amarilla es retratada con la misma crueldad que la raza negra. Eso contrasta fuertemente con el identitarismo actual, que considera a la raza amarilla como igualmente capacitada que la blanca y a la negra como muy inferior. El motivo se debe probablemente a cuestiones de índole "geopolítica" que interfieren en el asunto. En segundo lugar, Gobineau es un erudito amante de cierto rigor. Y, más importante, es hombre de su tiempo. Por lo tanto, en su obra no vemos aparecer en ningún momento al George Soros o al judío de turno tratando por todos los medios de bastardear a la raza blanca. Nada de "Plan Kalergi": Todos los fenómenos de mestizaje son descritos por Gobineau como procesos espontáneos y en gran parte inevitables, no como llevados a cabo por la acción premeditada de una minoría de poderosos. Esta segunda apreciación enlaza con el hilo sobre las conspiraciones, pues se confirma una vez más que el pensamiento de tipo conspiracionista es de origen recentísimo y que antes nadie pensaba en estos términos.
  5. Hispanorromano

    Eugenesia y racismo: cosas de progres

    El otro día terminé el libro Política de la familia, de Ferdinando Loffredo, un intelectual fascista que en la posguerra trabajó desde la Acción Católica. El libro es muy recomendable para toda persona que esté interesada en reactivar la natalidad española, pues aborda todas las cuestiones esenciales, desde la Religión hasta el feminismo. Siempre que leo algún libro anoto referencias que luego investigo en internet, pues generalmente me dan pistas útiles sobre multitud de temas. En esta ocasión la investigación me ha llevado por algunos derroteros que creo interesante compartir con vosotros antes de que se pierdan en mi memoria. Tenemos la idea de que la eugenesia es una cosa más bien de derechas. Un profesor de demografía recoge así la historia de la eugenesia en España [introduzco algunas notas en rojo]: El último párrafo no dice la verdad y si lo cito es por no mutilar el escrito. Este profesor de demografía es progresista y, como tiene mala conciencia por la responsabilidad del progresismo en la eugenesia y en los subsiguientes genocidios, se ve obligado a añadir este párrafo final según el cual el franquismo habría continuado con la eugenesia. Primero, se confunde al hablar de César Vallejo Nájera. El tan mentado doctor se llama Antonio, no César, y a poco que uno lea su obra "Eugenesia de la Hispanidad" se da cuenta de que lo que propone en realidad es una antieugenesia. Esto era muy común en la época: se utilizaba el nombre de eugenesia para cosas que, según la perspectiva actual, no son eugenesia. La Iglesia, por ejemplo, decía que la mejor eugenesia era la moral católica. Pero bueno, este tema se puede tratar aparte si alguien tiene dudas. El caso es que tenemos varias realidades comprobadas: Las ideas eugenésicas son introducidas en España por sectores progresistas. Las defienden muy especialmente anarquistas, republicanos y socialistas. Las derechas se oponen radicalmente. Los únicos periodos en los que las que el eugenismo es reprimido son la Dictadura de Primo de Rivera y la de Franco, es decir los dos únicos periodos en que la sociedad y la política giran hacia la derecha. La democracia -y esto no lo cuenta el profesor de demografía- rehabilita la eugenesia con el aborto eugenésico y la esterilización de deficientes. Queda claro que el eugenismo es una idea progresista y no hay ningún estudioso académico serio que discuta el hecho, aunque algunos lo intenten minimizar, como nuestro profesor de demografía, inventando una falsísima eugenesia franquista. En el caso del racismo, el origen progresista e ilustrado también está claro para muchos estudiosos de prestigio, pero pesa mucho la idea de que el racismo sería una cosa de derechas por las asociación que todos hacemos con el régimen nacionalsocialista. Por ello, es algo más difícil encontrar estudios académicos en español que expongan esta raigambre progresista del racismo. Y sobre todo al público general le choca mucho la idea de que el racismo pueda ser algo de izquierdas. Veamos si puede aportar alguna luz esta reseña de un libro sobre el hispanomericanismo durante la Restauración: Tres conclusiones que se pueden extraer de aquí: El "Día de la Raza" lo instituyó el liberalismo de la Restauración y lo mantuvo sin problemas la Segunda República. Es Franco el que lo cambia al "Día de la Hispanidad" con el aplauso de la Falange y de las derechas, que veían ese término mucho más adecuado. Los derechoides que se aferran a la primera denominación quedan retratados en su ignorancia. Quienes empiezan con los discursos raciales son los progresistas, entre ellos los krausistas, pues parten de la misma concepción naturalista y biologicista del hombre que da lugar a la eugenesia. El progresismo está en el origen de todas estas ideologías que reducen al hombre a la animalidad. Los conservadores y los reaccionarios de la época se oponen a esa interpretación racial. Los reaccionarios, como Menéndez Pelayo, exaltan la latinidad española frente a la raza germana, que asocian -con razón- al progresismo y a la barbarie. Habría mucho que hablar sobre estos temas. Y se podrían poner muchos más ejemplos. Pero de momento expongo estos breves apuntes para explicar la raigambre progresista de algunas ideas que hoy han asumido las derechas.
×